Cuando hablamos de vinos con una fuerte conexión con la tierra, a menudo escuchamos dos conceptos: viticultura natural y viticultura biodinámica. Aunque pueden parecer similares, tienen diferencias fundamentales en sus principios y prácticas. A continuación, te explicamos qué distingue a cada una y qué significa realmente cuando un vino se denomina “natural” o “biodinámico”.
La viticultura natural se basa en respetar al máximo los procesos naturales del viñedo y del vino, evitando cualquier intervención artificial o química.
🌿 Uso de plantas para curar plantas: Los viticultores naturales utilizan extractos de plantas (como cola de caballo, ortiga o ajo) para proteger la vid de enfermedades, en lugar de productos químicos sintéticos.
🌿 Ausencia de regulación oficial: No existe una normativa específica que regule el vino natural, por lo que cualquier productor puede etiquetar su vino como “natural” sin necesidad de certificaciones.
🌿 No se utilizan levaduras comerciales ni aditivos: La fermentación se realiza con levaduras autóctonas propias de la uva y de la bodega.
🌿 Mínima intervención en todo el proceso: Sin filtración, sin clarificación agresiva y con sulfitos mínimos o inexistentes.
La viticultura biodinámica sigue las teorías desarrolladas por Rudolf Steiner en el siglo XX. Este enfoque ve el viñedo como un ecosistema autosuficiente y se organiza según ciclos lunares y cósmicos.
🌿 Preparados biodinámicos: Se utilizan compuestos especiales (como estiércol fermentado en cuernos de vaca o infusiones de ortiga) descritos por Steiner para estimular la fertilidad del suelo y la salud de la vid.
🌕 Influencia astronómica: Las tareas del viñedo se planifican según el calendario lunar y planetario.
📜 Certificación obligatoria: Para poner “vino biodinámico” en la etiqueta, el productor debe pagar para obtener una certificación oficial, como la de Demeter.
A pesar de haber desarrollado todo este método, Rudolf Steiner no bebía vino. Esto ha generado debate sobre hasta qué punto sus teorías se adaptan a la realidad de la vinificación.
Mientras que la viticultura natural es un movimiento abierto, sin normas estrictas ni certificaciones obligatorias, la biodinámica está altamente estructurada y certificada, lo que puede limitar su evolución y adaptación a nuevas técnicas.
En definitiva, la viticultura natural apuesta por la libertad y la mínima intervención, mientras que la biodinámica sigue un enfoque más ritualizado y regulado.
Si quieres descubrir más sobre vinos naturales y su filosofía, síguenos y conoce cómo trabajamos para capturar la esencia más pura de la tierra en cada botella.
